jueves, 12 de julio de 2012

fresh banking

Con la expresión 'fresh banking' no me estoy refiriendo a ese invento que se sacó de la manga, o de la inspiración de un creativo, ING Direct. Es otra cosa. Consiste en sentarse en un banco a la sombra, en una calle transitada, y observar a los viandantes que que van y vienen. Es de las cosas más entretenidas que uno pueda imaginarse, y además gratis, por ahora. Ayer llegué con antelación a la cita en un bar muy adecuado para esa práctica, sito en la esquina de Goya con Velázquez, en pleno Barrio de Salamanca. Habíamos quedado para comer y ponernos al día. Durante 15 minutos estuve viendo pasar la vida... en rosa, o casi. Predominio de personas -mayoritariamente mujeres- que iban o venían 'de tiendas', o sea, 'de shopping', que es lo mismo pero a otro nivel y con más estilo. Por delante de mis ojos pasó media Marbella (la que todavía está en Madrid), parte de Sotogrande, tradicionales y bronceados clientes de Incosol, algún pionero de Caños de Meca (pocos), algún matrimonio de los veraneantes de toda la vida en San Sebastián, incluso algún promotor urbanístico de la zona Pozuelo / Aravaca que llevaba toda la pinta de ir a comer con otros proletarios al Club Financierro. Bueno, como ocurre siempre en cualquier parte, también pasaron personas invisibles (quizá como yo mismo) en las que nadie repara: meros figurantes para hacer más notoria la verosimilitud del espectáculo. Cada viandante, cada mujer de mediana edad con gafas oscuras y mechas rubias, es una invitación a imaginar fugazmente su vida; pero no como probablemente es, sino como podría ser, o como debería. Luego está el misterioso caso de la señora mayor con perrito. No falla, siempre en esa esquina acaba pasando una señora impecablemente vestida y peinada, con un perrito, generalmente blanco, y es posible que con unos aires de grandeza y unos veraneos en Biarritz y Estoril del todo anacrónicos, pero que sigue encantada de la vida y probablemente se dirige hacia una joyería cercana, en Serrano, con intención de abrasar la Visa Oro. Y así estaban las cosas cuando llegó mi amiga, casi puntual a la cita. Puedo asegurar que es una mujer que tiene muy buen gusto, es atractiva, inteligente     y progresista.

1 comentario:

  1. Vaya thriller erotico que te has montado en plan La Ventana Indiscreta. Buenisimo lo del espejo y el osservatore romano. ¿Pero al final que es lo que pasa? No queda claro si la matan o se corta ella con la cuchilla o qué, pero ha estado muy bien.

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