lunes, 26 de septiembre de 2011

más citas, por favor

 Una vez le escribí a una amiga muy veloz un mail que decía así: "si no lo leo no lo creo." Ella me respondió al instante: "si no lo creo no lo veo." Quizá los dos estábamos en lo cierto. De las cosas leídas últimamente (¿hasta dónde llega 'últimamente'? ¿por cuánto tiempo se está 'reciencasado'?), algunas las recuerdo y otras las anoto en libretas... para poderlas recordar. Por ejemplo, recuerdo dos ideas formuladas por Coetzee en Verano: 1) "Para el fatalista, la historia es el destino." 2) "Tenía un cierto estilo, y el estilo es el inicio de la distinción." Este pasado fin de semana he leído una frase del colombiano Juan Gabriel Vásquez que aún tengo fresca en la memoria: "necesitamos conocer lo posible además de lo cierto; lo que pudo ser además de lo que fue." Las viñetas diarias de El Roto son una fuente inagotable de síntesis y lucidez; no hace mucho, mostraba a un tipo anhelando alcanzar el firmamento con la mano, y decía: "¡Hay millones de estrella sin dueño! ¡Qué locura!" Alguien citaba hace unos días una reflexión muy de Umberto Eco: "El público perjudica a la televisión." Y un tema muy de actualidad, aunque todavía no en España: "Grupos desesperados de ricos intentan en vano que les suban los impuestos, conscientes los magnates de que pagan menos tasas que sus chóferes", ironizaba Manuel Rivas. Hace un par de semanas copié esta reflexión de Vicente Verdú: "La distancia es el deseo, y viceversa." Y más abajo añadía: "Todo amor cuerpo a cuerpo mata como un duelo a espada. Lo indispensable para sentir vida y pasión es, justamente, el intervalo que preserva del franco cara a cara entre el tú y el yo." Y ahora que un amigo del alma me ha regalado la edición perfecta (Lumen) de la poesía completa de Borges, cómo no darme el gusto de traer aquí la dedicatoria, tan irónica y borgiana, que precede a Fervor de Buenos Aires. Dice: "A quien leyere. Si las páginas de este libro consienten algún verso feliz, perdóneme el lector la descortesía de haberlo usurpado yo, previamente. Nuestras nadas poco difieren; es trivial y fortuita la circunstancia de que seas tú el lector de estos ejercicios, y yo su redactor." J.L.B. Hace un momento pensaba concluir este post con esa dedicatoria tan definitiva, pero ahora lo encuentro excesivo para mi modestia de copy en crisis. Concluyo con un microrrelato firmado por 00Daniel7 y leído tras la siesta, en El País Semanal, alguna tarde del pasado agosto. Dice así: "Maremoto: ¡Ola! y adiós."

1 comentario:

  1. Definitivamente los lunes me perturban, hoy en un acto de presunción no he necesitado diccionario, pero necesito tiempo para analizar tus citas. Tendré que agradecerte los ejercicios mentales que me proporcionas y espero que además de enriquecer mi intelecto, me prevengan del alzheimer. Gracias. Besos
    C.R.

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